Hebreos 13:1: Permanezca el amor fraternal.
1 Pedro 1:22: Habiendo purificado vuestras almas por la obediencia a la verdad, mediante el Espíritu, para el amor fraternal no fingido, amaos unos a otros entrañablemente, de corazón puro.
Los creyentes estamos llamados a amar a los hermanos con el amor que enseña la Biblia, un amor que se origina en Dios, diferente al amor que las personas del mundo ofrecen, que tiene un origen en el hombre mismo.
Si le preguntamos a una joven adolescente lo que es el amor, sobretodo si es de esas que ve muchas telenovelas, nos dirá con un suspiro “el amor es el sentimiento mas bello que existe”. Pero aunque el amor bíblico puede ir acompañado de sentimientos, no es en si un sentimiento, de hecho el amor que enseña la Biblia puede muchas veces ir en contra de los sentimientos.
La más grande demostración de esto es la experiencia de Cristo en el huerto de getsemani antes de su arresto. Dice la palabra que Cristo estaba en gran agonía, sus sentimientos estaban en contra de ir a la Cruz, tanto así que dice la palabra que oró diciendo “Padre si es posible pasa de mi esta copa”, pero a pesar de su angustia se levanto y fue a la Cruz, ¿y por que lo hizo?, por amor a nosotros. O sea que el amor bíblico hace la voluntad del Padre al margen de los sentimientos.
Si le hacemos la misma pregunta de ¿qué es el amor? a un intelectual lo mas seguro nos dirá que “el amor no es mas que la respuesta de nuestra mente a las acciones y actitudes que recibimos de otros”, y una vez mas tenemos que decir que aunque es cierto que el amor bíblico aumenta grandemente cuando es reciproco, sin embargo el amor que enseña la Biblia se produce sin tomar en cuenta las actitudes y acciones de los otros.
Eso lo vemos claramente en Juan 3:16 donde la Palabra nos dice que Dios amó grandemente al mundo. ¿Y a que mundo se refiere? A un mundo impío que le había dado la espalda, lo había traicionado y lo había injuriado. Dios amó a un mundo que se había convertido en su enemigo. O sea que el amor bíblico debe manifestarse a pesar de nuestros sentimientos y de las actitudes y acciones que los demás nos demuestren.
Pero otra característica importante del amor bíblico es que contrario al amor del mundo no discrimina, no hace acepción de personas. En el mundo las personas eligen a quien amar, pero los cristianos estamos puestos para amar a todas las personas y en especial a todos los que forman parte de la familia de Dios.
Esto lo enfatiza el apóstol Pablo en su carta a los romanos cuando nos dice en el capítulo 13 que los creyentes no debemos tener deudas con nadie sino solo el amor. Los creyentes tenemos una deuda de amor para con todos, tenemos la deuda de manifestar a todo el mundo el mismo tipo de amor que hemos recibido de Dios.
Habiendo mencionado estas características del amor bíblico, con el que debemos amar a los hermanos, pasemos ahora a analizar de manera más específica nuestro tema el compromiso con el amor fraternal, esto lo haremos bajo tres puntos:
1. La motivación del compromiso con el amor fraternal
La palabra de Dios nos presenta tres razones que deben motivarnos grandemente a comprometernos a amar a los hermanos. Debemos comprometernos con el amor fraternal porque:
A. ES LA EVIDENCIA DE QUE SOMOS SALVOS
- La Palabra nos enseña claramente que el amor a los hermanos es la evidencia definitiva de que somos salvos.
1 Juan 3:14 nos dice: “Nosotros sabemos que hemos pasado de muerte a vida, en que amamos a los hermanos. El que no ama a su hermano, permanece en muerte”.
- Lo que el apóstol Juan nos esta diciendo es que la manera mas confiable de saber si una persona es o no salva es observando su amor por los hermanos. Y es curioso destacar que el apóstol Juan escribe esto después de que ya el apóstol Pablo había dicho en su epístola a los romanos en el capitulo 8:16 que el Espíritu es quien da testimonio en nosotros de que somos hijos de Dios, y aun el mismo Juan en 1 Juan 4:13 declara que el hecho de poseer el Espíritu Santo nos confirma que verdaderamente somos salvos.
- Así que lo que Juan nos está diciendo en 1 Juan 3:14 es que el amor a los hermanos es la evidencia visible de que verdaderamente tenemos el Espíritu Santo, lo que Juan esta haciendo es planteando las cosas al estilo de Santiago el escritor del cristianismo practico, Juan nos está diciendo no me digas que tienes el Espíritu, demuéstramelo practicando el amor, que como sabemos es el primer fruto del Espíritu, Gálatas 5:22.
- El apóstol Pablo empieza la lista del fruto del espíritu con el “amor” porque el amor hace que el resto sea una consecuencia natural, sin amor no puede haber gozo, paz, paciencia, benignidad, etc. Así pensaba Martín Lutero quien cuando comentaba sobre ese pasaje de la epístola a los Galatas dijo “hubiera sido suficiente, con haber dicho amor, y nada más, por que el amor se extiende a todos los frutos del Espíritu”.
Así que es importante que nos comprometamos a amar a los hermanos, pues esta es la principal evidencia de que somos salvos.
B. ES LA EVIDENCIA DE QUE SOMOS OBEDIENTES A LA PALABRA DE DIOS
- Cuando un experto en la ley se acercó al Señor para preguntarle sobre el mayor mandamiento de la ley, el Señor le declaró que toda la ley y los profetas, es decir todo el Antiguo Testamento, se basaban en el amor, “Amaras a Dios con todo tu corazón, y a tu prójimo como a ti mismo”, así también lo declara pablo cuando le dice a los cristianos de Roma en Romanos 13:10 que el cumplimento de la ley es el amor.
- Pero el amor no solo forma la base del sistema de la ley del Antiguo Testamento sino que es además uno de los temas centrales del nuevo testamento. En el nuevo testamento encontramos al menos 25 veces la orden directa de amar a otros, pero lo más grandioso es que de estas 25 veces que se nos ordena a amar a otros 15 son un mandato a amar a los hermanos en Cristo. Este mandato vino como una orden directa del Señor que podemos encontrar en Juan 15:17 “Esto os mando: Que os améis unos a otros”, orden que repite unas 4 veces a través de los evangelios. Y que se nos reitera unas 10 veces con las mismas palabras a través de las epístolas (1 Tes. 4:9, Ro. 13:8, 1 P. 1:22, 1 Jn. 3:11).
- O sea que cuando amamos a los hermanos no solo estamos cumpliendo la ley sino que además estamos cumpliendo la orden más acentuada en todo el NT. Pero a más de esto aun tenemos una razón más para comprometernos con el amor fraternal:
C. ES LA EVIDENCIA DE QUE CRISTO ES VERDADERO
- En Juan 17:23 se nos dice: “Yo en ellos, y tú en mí, para que sean perfectos en unidad, para que el mundo conozca que tú me enviaste, y que los has amado a ellos como también a mí me has amado”. En este versículo el Señor nos declara cómo a través de la unidad perfecta de los creyentes, el mundo conocería que verdaderamente el había sido enviado por el Padre, ¿Cuál es el vinculo para la perfecta unidad? La respuesta está declarada en Colosenses 3:14 cuando dice: “Y sobre todas estas cosas vestíos de amor, que es el vínculo perfecto”.
- Lo que el Señor nos esta diciendo es que la unidad producida por el amor fraternal en la iglesia, es un medio que Dios utiliza para que el mundo sepa que Cristo es verdadero, que Él existía desde el principio, que Él estaba con Dios, que Él era Dios, y que fue enviado por Dios a tomar forma de hombre y morir por los pecados.
- Esto es algo un poco abstracto y quizás difícil de entender pero la Palabra nos declara que de una forma maravillosa una congregación unida en amor se convierte en un testigo poderoso de nuestro Señor.
Estas tres grandes razones deben ser suficiente motivación para que todos los creyentes nos comprometamos a amar a los hermanos.
Pero una vez comprometidos necesitamos saber como manifestar ese amor.
2. La manifestación del compromiso con el amor fraternal
A. MANIFESTADO A TRAVÉS DE ACCIONES
- La palabra de Dios nos enseña que el amor debe ser manifestado a través de acciones, esto es lo que el apóstol Juan nos dice en 1 Juan 3:18 – “Hijitos míos, no amemos de palabra ni de lengua, sino de hecho y en verdad”.
- Si analizamos las Escrituras veremos que el amor siempre se traduce en acciones:
- Juan 3:16 nos dice de tal manera amó Dios al mundo que dio…
- Juan 15:13 el Señor nos dice que no hay mayor amor que este que uno ponga…
- 2 Corintios 8:9 nos dice que el Señor JC por amor a nosotros siendo rico se hizo…
- Así que, como vemos, el amor se manifiesta en acciones por lo tanto el compromiso con el amor fraternal queda manifiesto en la medida que cumplimos aquellas acciones que la palabra nos enseña que debemos realizar unos a otros.
B. ACCIONES QUE MUESTRAN EL AMOR FRATERNAL GENUINO
Mencionemos algunas de estas acciones a través de las cuales manifestamos el amor, y vamos a utilizarlas como parámetro para medir el nivel de nuestro compromiso actual con el amor fraternal.
1. MANIFESTAMOS EL AMOR CUANDO SERVIMOS A LOS HERMANOS
Gálatas 5:13 “…servíos por amor los unos a los otros”. Aunque la palabra nos habla de un don de servicio tenemos que tener claro que todos los creyentes estamos llamados a servir, pues eso es lo que somos siervos de Cristo y consiervos unos de otros, pero además vemos aquí que el servicio es una manera de manifestar el amor a los hermanos. Hermano ¿que tanto estas sirviendo a los demás? ¿Esta formando parte de algún ministerio a través del cual sirves a los hermanos? ¿Estás en la iglesia esperando ser servido o estás buscando las oportunidades de servir?
2. MANIFESTAMOS EL AMOR EN LA MEDIDA EN QUE NOS PREOCUPARNOS POR LOS HERMANOS
1 Corintios 12:25 “…que los miembros todos se preocupen los unos por los otros”. Te preocupas por saber cuales son sus problemas, o ¿estás tan envuelto en los tuyos que no tienes tiempo de pensar en los demás? Más sencillo aún te has tomado el tiempo de conocer a cada uno de los hermanos de tu congregación personalmente. ¿Qué tanto te preocupas por los demás hermanos?
3. MANIFESTAMOS EL AMOR EN LA MEDIDA QUE SOPORTAMOS A LOS HERMANOS
Efesios 4:2 “…soportándoos con paciencia los unos a los otros en amor”. En todas las iglesias hay hermanos difíciles, uno por ser débiles en la fe, otros por tener un carácter difícil de manejar, pero la palabra nos dice que debemos soportar esos hermanos en amor, fíjese que dice soportar no evitar, pues es lo que solemos hacer, manifestamos el amor cuando a pesar de ser como son seguimos compartiendo y pasando tiempo con ellos.
¿Qué tanto estás en la disposición de soportar a los hermanos?
4. MANIFESTAMOS EL AMOR CUANDO LLEVAMOS LAS CARGAS DE LOS HERMANOS
Gálatas 6:2 “Sobrellevad los unos las cargas de los otros…”. Esto nos habla de cómo debemos de ser sensibles a los problemas y necesidades de los hermanos.
¿Qué tanto te esfuerzas por alivianar las cargas de los hermanos?
5. MANIFESTAMOS EL AMOR CUANDO EDIFICAMOS A LOS HERMANOS
1 Tesalonicenses 5:11 “…edificaos unos a otros”. La edificación de los creyentes no es sólo una responsabilidad de los pastores, el amor de Cristo que nos une debe motivarnos a todos a preocuparnos por la edificación de cada uno de los miembros de nuestra iglesia. ¿Qué tanto te preocupas por la edificación de los demás? ¿Estás pendiente a esos hermanos que por una razón u otra se han ido enfriando y se han ido alejando poco a poco de la congregación? ¿Qué tanto estas cooperando con las actividades que conllevan a la edificación de la iglesia?
6. MANIFESTAMOS EL AMOR CUANDO EXHORTAMOS A LOS HERMANOS
Colosenses 3:16 “…exhortándoos unos a otros…”. A veces notamos que un hermano asume una actitud o un comportamiento que va en contra de la Palabra, pero en vez de acercarnos al hermano y amonestarle nos hacemos de la vista gorda, pensando que eso es trabajo solamente de los pastores y ancianos, pero la Palabra nos dice que es nuestro deber exhortar al hermano en amor.
¿Qué tanto estás dispuesto a comprometerte para exhortar y ayudar a los hermanos?
7. MANIFESTAMOS EL AMOR CUANDO PERDONAMOS A LOS HERMANOS
Efesios 4:32 “…perdonándoos unos a otros.. “.. Definitivamente no podemos decir que tenemos amor si no somos capaces de perdonar a los hermanos, el camino del amor no es otro que el camino del perdón, el amor de Dios se mostró en que estuvo dispuesto a perdonar todas nuestras ofensas. Sin embargo hay cristianos que durante años y años mantienen un profundo rencor y una gran amargura contra otros cristianos. Quizás lo ofendieron grandemente, pero recuerde que todos sus pecados ofendieron grandemente al Señor y Él le ofreció el perdón. ¿Qué tanto estás dispuesto a perdonar a tus hermanos?
8. MANIFESTAMOS EL AMOR EN LA MEDIDA EN QUE PRACTICAMOS LA HOSPITALIDAD CON LOS HERMANOS
1 Pedro 4:9 “Hospedaos los unos a los otros…”. Practicamos la hospitalidad en la medida en que recibimos a los hermanos en nuestros hogares, la hospitalidad es más que eso, implica compartir todo lo que tenemos con los hermanos. ¿Qué tanto estás dispuesto a hospedar sin murmuración a tus hermanos?
9. MANIFESTAMOS EL AMOR FRATERNAL CUANDO ORAMOS POR LOS HERMANOS
Santiago 5:16 “…orad unos por otros…”. Cada vez que nos reunimos como iglesia a orar no solo estamos cumpliendo con el mandato que tenemos de orar como cuerpo de Cristo sino que además estamos diciendo a los hermanos que les amamos, que nos interesan sus motivos de oración, que queremos unirnos a ellos y que ellos se unan a nosotros en un solo clamor a Dios. ¿Qué tanto estás dispuesto a orar por tus hermanos?
10. MANIFESTAMOS EL AMOR FRATERNAL EN LA MEDIDA EN QUE PREFERIMOS LA HONRA DE LOS HERMANOS
Romanos 12:10 “Amaos los unos a los otros con amor fraternal; en cuanto a honra, prefiriéndoos los unos a los otros”. La tendencia natural de nuestro ser egoísta y egocéntrico es sobresalir, ser el centro de atención, estar entre aquellos que reciben la honra, por eso vemos que en las entregas de premios, los que ganan son siempre cuidadosos de mencionar a todos los participantes en los agradecimientos, de lo contrarió tienen problemas. Pero en la iglesia no debe ser así, Pablo nos dice que el amor debe llevarnos a preferir la honra de los hermanos antes que la nuestra. ¿Qué tanto estás dispuesto a exaltar a los hermanos más que a ti?
Ese resultado es el porcentaje de su compromiso actual con el amor fraternal, y si tomamos en cuenta lo que mencionamos en nuestro primer punto, lo que estamos diciendo es que ese resultado es:
- El porcentaje en que usted manifiesta que es
- El porcentaje en que usted manifiesta su obediencia a la Palabra de Dios.
- El porcentaje en que usted contribuye a que las personas reconozcan que Cristo y su evangelio son verdaderos.
Ese resultado es entre usted y Dios, sin embargo yo quiero saber si alguien sacó 100, ¿nadie verdad? Eso quiere decir que todos necesitamos crecer en el amor fraternal, quizás unos más que otros, pero todos necesitamos crecer pues nuestra meta es llegar ser perfectos.
Es por eso que Pablo les declara a los Tesalonicenses que a pesar de ser una iglesia conocida por su amor era necesario que continuaran creciendo cada vez mas, 1 Tesalonicenses 4:9-10 “Pero acerca del amor fraternal no tenéis necesidad de que os escriba, porque vosotros mismos habéis aprendido de Dios que os améis unos a otros; y también lo hacéis así con todos los hermanos que están por toda Macedonia. Pero os rogamos, hermanos, que abundéis en ello más y más “.
Eso nos lleva entonces a nuestro tercer punto:
3. Manteniendo el compromiso con el amor fraternal
Para mantener el amor fraternal necesitamos de una sola cosa, comunión, mantendremos el amor en la medida en que tenemos:
A. COMUNIÓN CON DIOS
- Como dijimos anteriormente el amor es un fruto del Espíritu, es decir es algo que es producido en nosotros por el Espíritu Santo, recibimos la capacidad de amar con el amor bíblico en el momento en que Dios vino a morar en nosotros. No es algo que está en nuestra naturaleza carnal sino en esa nueva naturaleza implantada en nosotros por Dios. Por lo tanto para crecer en el amor a los hermanos necesitamos crecer en la comunión con
- Mientras más crecemos espiritualmente, mientras más nos asemejamos a Dios, mientras más nos dejemos llenar de su Espíritu más fácil será para nosotros manifestar el amor a los hermanos.
- Es por esto que Pedro nos dice en ese versículo que utilizamos como texto, que una vez que hemos purificado nuestras almas a través del Espíritu, es decir la hemos limpiado de toda nuestra suciedad y la hemos llenado de Dios, entonces estamos listos para el amor fraternal verdadero. 1 Pedro 1:22 “Habiendo purificado vuestras almas por la obediencia a la verdad, mediante el Espíritu, para el amor fraternal no fingido, amaos unos a otros entrañablemente, de corazón puro”.
Sin embargo aunque el amor es un fruto espontáneo del Espíritu Santo, necesita ser cultivado es por esto que además de comunión con Dios si queremos crecer en el amor fraternal necesitamos tener:
B. COMUNIÓN CON LOS HERMANOS
- Todas las virtudes cristianas tienen su causa en Dios, sin embargo no podemos desarrollarlas a menos que no las practiquemos. Eso pasa con el amor que practiquemos el amor, la única manera de llevar el amor a la práctica es a través de la comunión con los hermanos.
- Es por esto que el escritor de los hebreos nos recuerda la importancia de congregarnos para crecer en el amor, ver Hebreos 10:24-25 – “Y considerémonos unos a otros para estimularnos al amor y a las buenas obras; no dejando de congregarnos, como algunos tienen por costumbre, sino exhortándonos; y tanto más, cuanto veis que aquel día se acerca”. Así también en Efesios 4:16, el apóstol Pablo nos recuerda que en la medida que todos trabajemos juntos y hagamos nuestra parte dentro de la iglesia creceremos en amor. “…de quien todo el cuerpo, bien concertado y unido entre sí por todas las coyunturas que se ayudan mutuamente, según la actividad propia de cada miembro, recibe su crecimiento para ir edificándose en amor”.